viernes, 15 de julio de 2011

TENEMOS LO QUE VOTAMOS O VOTAMOS LO QUE TENEMOS

Estamos en unos momentos económicos muy inciertos, La economía mundial avanza a paso de tortuga, el euro tiembla, Europa se tambalea y  amenaza con hundirse, las deudas de los países se encarecen, Estados Unidos intenta llegar a acuerdos para no hacer una suspensión de pagos, Grecia hecha humo, La deuda italiana esta por alcanzar la española, ¿pero qué podemos hacer?

En Italia, al primer aviso de que la economía italiana está en apuros, los diferentes partidos políticos italianos se agrupan y toman las medidas necesarias para parar el desastre. Dan un mensaje de unidad para calmar los mercados, y hacen su trabajo.

Algunas de las medidas tomadas son:

  • Aumento la edad de jubilación.
  • Reducción de los sueldos de los funcionarios. Empezando con los de los políticos.
  •  Reducción de gastos públicos, empezando por los gastos de los políticos, como vuelos, coches oficiales etc.
  • Pago de parte de las visitas médicas por parte de los usuarios.
  • Ponen tasas a los fondos de inversión.

 Como estas medidas se han tomado “en consenso” dan una imagen de unidad de toda la clase política frente a la crisis. El país es más importante que quien lo gobierna; y  las primeras medidas tomadas son las que afectan a los propios políticos, para dar ejemplo, y orgullosos de poder hacerlo.

Y mientras tanto, en España se toman  medidas muy descafeinadas y del todo insuficientes, los políticos están en una guerra abierta y hacen la oposición más rigurosa que pueden.

¿Y por qué los políticos italianos actúan de una manera y los españoles de otra?

No es por que España está mejor que Italia, ni por que los italianos son más conformistas que los españoles, o por que en Italia se viva mejor que en España y no les importe que se les recorte el estado de bienestar; es por que en Italia no tendrán elecciones hasta 2013 y  en España están a la vuelta de la esquina, y llegar al poder o intentar mantenerse en él es más importante que el propio país; así que los políticos harán todo lo posible por acceder al poder, llevándose lo que sea por delante, y si lo que hay delante es su propio país, no importa, ya le echarán la culpa al otro partido político y se quedarán tan anchos.

Desde aquí, hago una llamada a la cordura y la unidad de todos, sean del partido que sean, para no llegar a la situación de Grecia, Portugal o Irlanda. Y animo a los políticos a sentarse y trabajar formando un equipo común por unos meses, sacar medidas efectivas y acordadas entre todos, y dejar la guerra para el periodo electoral. Creo que esto reforzaría la credibilidad de los políticos, que actualmente está por los suelos, y seguro que calmaría los mercados financieros y animaría la economía.

Pongo los cometarios que hizo ayer Tremosni, ministro de economía italiano, que creo que hizo una intervención muy acertada:

"Hoy en Europa hay una cita con el destino: la salvación no llega desde las finanzas, sino desde la política. Pero la política no puede cometer errores, también porque es como con el Titanic: no se salvan ni siquiera los pasajeros de primera clase. Hemos llegado juntos al dilema y al drama del euro y de Europa. O se sigue adelante juntos o se va a pique. La solución o es política o no es, sin ilusiones de salvación para ninguno"

(Texto extraído de La Vanguardia)

No hay comentarios:

Publicar un comentario